El consejero de Sanidad de Extremadura, José María Vergeles, ha puesto sobre la mesa una fórmula para tratar de paliar la fuga de talento de los médicos residentes de España y, de paso, garantizar que se puedan cubrir las plazas en las zonas rurales más despobladas

Su solución pasa por blindar la presencia de los MIR en el Sistema Nacional de Salud (SNS) con un nuevo modelo de contrato de “estatutarios en prácticas”, que se formalice automáticamente al acabar la Formación Sanitaria Especializada (FSE). El vicepresidente autonómico ha dejado caer esta posibilidad como una “herramienta diferente” para evitar que los facultativos tengan que superar dos fases de oposición para hacerse con una plaza definitiva en la sanidad pública. “Si no lo puedo hacer por la vía criminal, lo hago por la civil, pero lo hago”, ha apuntado en una entrevista con Redacción Médica en el seno del XI Encuentro de Altos Cargos de la Administración Sanitaria, en el que han colaborado Abbott, Abex Excelencia Robótica, Air Liquide Healthcare, Cardiva, Fresenius Medical Care, General Electric Healthcare, Pfizer y Sanofi.

Para poder materializar este cambio estructural en el mecanismo de contratación de los médicos, Vergeles ha propuesto directamente acometer una reforma en el Estatuto Marco de personal de los servicios de salud que precisamente esta semana ha entrado en una nueva fase de negociaciones entre el Ministerio de Sanidad y los sindicatos. “Las leyes están para modificarlas”, ha argumentado el consejero, que ha cerrado la puerta a otras medidas más drásticas como obligar a los profesionales a ejercer un tiempo mínimo en el SNS al acabar su formación, de manera similar a la que aplica el Ejército.

El responsable de la sanidad extremeña ha expuesto su alternativa como una fórmula para retener talento en un momento marcado por las jubilaciones masivas que se esperan en los próximos años y por el incremento de la carga asistencial y las listas de espera que han protagonizado este verano algunos territorios como su propia región. “Tenemos que pegar un arreón muy grande a la Formación Sanitaria Especializada, sacando todo lo que tengamos acreditado, porque es una inversión interesantísima”, ha agregado.

La hoja de ruta de Vergeles para lograr reforzar las plantillas sanitarias no pasa por incrementar el número de facultades en las que se imparte Medicina, aunque sí por equilibrar el número de estudiantes matriculados en la universidad pública en comparación con la privada para “fabricar el número de graduados de Medicina que va a necesitar el Sistema Nacional de Salud”, manifiesta en una entrevista en Redacción Médica.

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