El vicepresidente primero del Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos (CGCOM), Tomás Cobo, participó en la XXII Reunión Nacional de Cirugía de la Asociación Española de Cirujanos (AEC), celebrada en Santander, en la que subrayó que “tenemos la capacidad de movilizar a médicos que tienen ganas de cooperar”

Tomás Cobo subrayó que los Colegios de Médicos, además de cumplir su función, “deben ser útiles para los colegiados a nivel formativo y de acercamiento al entorno de la protección social”. Cobo señaló que la Fundación para la Protección Social de la OMC invierte cada año 14 millones de euros para los médicos colegiados.

Explicó que en 2011 se creó la Fundación de los Colegios Médicos para la Cooperación Internacional  (FCOMCI) con la idea de hacer acciones en el terreno, “para intentar que la labor desempeñada con entusiasmo no fuera fútil y sin ningún tipo de feedback”. El objetivo es ayudar a los profesionales que salen fuera, tanto los que van a cooperar como los médicos voluntarios, a través de la convalidación de los títulos en el país al que acuden con la creación de los certificados de idoneidad, que acredita la titulación.

Además, “se potencia la intercomunicación entre los profesionales que impulsa la capacidad de colaboración y destacó la importancia de estar registrados y de la formación, porque muchas veces no se tiene conocimiento de las enfermedades que los médicos se van a encontrar en el país de destino”.

En los Colegios de Médicos se han creado 28 oficinas de cooperación. Además, incidió en que la FCOMCI “sirve de paraguas con  el seguro de responsabilidad profesional y el seguro de viaje”. Puntualizó que la fundación se encuentra “en un engranaje potente como es la entidad médica nacional, que se encarga de representar a la profesión médica en su conjunto a nivel estatal e internacionalmente”.

Añadió que la Escuela Latinoamericana de Medicina es “una fábrica de sueños” y forma a médicos que desarrollan su labor fundamentalmente en África  y tiene dos bloques de conocimiento: salud pública y herramientas básicas en anestesia y cirugía. “La idea es que estos profesionales trabajen en el entorno rural y acudan a los hospitales atendiendo las patologías que suceden en el día a día en ese centro. Tenemos la capacidad de movilizar a médicos que tienen ganas de cooperar y también contamos con el conocimiento adquirido para formar a formadores”, expuso.

La reunión contó con más de 1.000 asistentes; 1.668 comunicaciones recibidas, de las cuales se aceptaron 1.045; 162 comunicaciones orales; 83 videos; 40 video corner; 695 posters, de los cuales 65 fueron posters con presentación; 81 sesiones realizadas, de las cuales 34 fueron mesas simposios, 8 conferencias, 5 simposios comerciales y sesiones de comunicaciones orales, videos y posters.

FOTO: Intervención de Tomás Cobo, segundo por la derecha, en la XXII Reunión Nacional de Cirugía.