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Los médicos generales y de familia europeos se suman a la OMS para alertar sobre la falta de profesionales sanitarios en zonas rurales
Los pasados 22 y 23 de marzo se celebró en Bucarest (Rumania) una reunión de alto nivel de la OMS, en la que se aprobó la Declaración de Bucarest sobre el personal sanitario y asistencial en Europa. La Unión Europea de Médicos Generales y de Familia (UEMO) da la bienvenida y se une a esta declaración que pone de relieve la necesidad retener y atraer trabajadores sanitarios y asistenciales a las zonas rurales, remotas y desatendidas.
Esta declaración pone de manifiesto que, a pesar del número históricamente alto de trabajadores de la salud en toda la región europea de la OMS, los sistemas nacionales de salud están experimentando dificultades para hacer frente al aumento de demanda de servicios de salud. Un incremento de la demanda que se debe, fundamentalmente, al envejecimiento de la población y al aumento de pacientes con enfermedades crónicas; a lo que hay que añadir la elevada edad media de los trabajadores y a la dificultad para atraer o retener a los profesionales más jóvenes.
La Organización Mundial de la Salud hace, en esta declaración, una llamamiento especial para la retención y atracción de trabajadores sanitarios y asistenciales a las zonas rurales, remotas y desatendidas.
La evidencia científica indica que los sistemas basados en atención primaria de salud eficaz, con profesionales altamente capacitados y que trabajan en la comunidad, ofrecen una atención mejor y más rentable, en comparación con los sistemas con un enfoque más débil de la AP.
Sin embargo, sigue siendo difícil reclutar y retener a los médicos generales y de familia, por ello es necesario que los responsables sanitarios se den cuenta que esto solo será posible cuando se reconozca el importante papel que juegan en el sistema de salud y sea adecuadamente reconocido, valorado y respetado.
Un gran número de estos profesionales trabaja bajo una gran presión y tensión, y es esencial que puedan desarrollar su labor en entornos seguros y que dispongan del tiempo y los recursos suficientes para atender a cada paciente; de lo contrario, el riesgo de agotamiento y de desilusión es muy real.
Las probabilidades de éxito en el reclutamiento y la retención serán mayores a través de una mezcla de incentivos financieros y no financieros. Mientras que la remuneración adecuada y las condiciones de trabajo siguen siendo esenciales, cada vez es más importante ofrecer un trabajo flexible, con disposiciones que promuevan la conciliación de la vida familiar, laboral y social, así como oportunidades de desarrollo profesional.
Si la Medicina de Familia no es atractiva para los médicos jóvenes, todo el SNS se verá perjudicado con aumento de costes, sobrecarga de hospitales y peor atención a la población.
La UEMO continuará abogando por políticas adecuadas que ayuden de forma eficaz a mitigar la escasez actual de médicos generales y de familia en Europa.