Investigación, divulgación y cooperación, claves del papel de las sociedades científicas médicas en la lucha contra el cambio climático. Así lo destaca el Dr. Carlos Almonacid en esta entrevista a Médicos y Pacientes.

El Dr. Almonacid es jefe de servicio de Neumología del Hospital Universitario Puerta de Hierro. Además, es el actual vicepresidente neumólogo de la Sociedad Española de Neumología (SEPAR) y vocal de la Junta Directiva de la Federación de Asociaciones Científico Médicas de España (FACME). El doctor participó el pasado mes de marzo en el seminario de la Fundación para la Formación de la Organización Médica Colegial en colaboración con GSK sobre las acciones de las sociedades científicas para luchar contra el cambio climático.

¿Cuál es el papel de las sociedades científicas en la lucha contra el cambio climático?

Las sociedades científicas desempeñan un papel fundamental en la lucha contra el cambio climático, principalmente a través de las siguientes vías:

Investigación y desarrollo. Promueven y financian investigaciones sobre el cambio climático para entender mejor sus causas, efectos y posibles soluciones. Esto incluye estudios sobre tecnologías de mitigación y adaptación, así como la modelización del clima y la evaluación de los impactos ecológicos y sociales.

Divulgación y educación. Trabajan en la sensibilización y educación del público y de los decisores políticos sobre las causas y efectos del cambio climático. Esto se logra mediante la publicación de informes, la organización de conferencias y talleres, y la participación en debates públicos.

Política y asesoramiento. Las sociedades científicas a menudo actúan como asesores de gobiernos y organizaciones internacionales, proporcionando la evidencia científica necesaria para formular políticas de cambio climático efectivas. Su trabajo ayuda a asegurar que las decisiones políticas estén basadas en los datos más actuales y confiables.

Cooperación internacional. Fomentan la colaboración entre científicos de diferentes países y disciplinas para abordar el cambio climático de manera integral. Esta cooperación puede acelerar el desarrollo de soluciones y facilitar su implementación a escala global.

Innovación tecnológica. Incentivan el desarrollo y la implementación de tecnologías verdes que pueden reducir las emisiones de gases de efecto invernadero. Esto incluye la investigación en energías renovables, sistemas de captura de carbono, y mejoras en la eficiencia energética.

En el ámbito de su especialidad, ¿qué medidas puede tomar para reducir el impacto sobre el cambio climático?

En el contexto de una sociedad de neumología, hay varias medidas específicas que se pueden tomar para reducir el impacto sobre el cambio climático, aprovechando su expertise en salud respiratoria y su influencia en la comunidad médica y el público en general:

Promoción de la calidad del aire. Las sociedades de neumología pueden liderar campañas de concienciación sobre los riesgos para la salud de la contaminación del aire, que está directamente relacionada con el cambio climático. Al mejorar la calidad del aire, no solo se mitigan los efectos del cambio climático, sino que también se reducen las enfermedades respiratorias crónicas como el asma y la EPOC.

Investigación sobre impactos respiratorios. Realizar y apoyar investigaciones sobre cómo el cambio climático afecta la salud respiratoria. Esto incluye estudiar el impacto de los patrones de clima extremo y la contaminación atmosférica en enfermedades respiratorias. Los hallazgos pueden ayudar a formular políticas públicas más efectivas y a diseñar intervenciones clínicas adecuadas.

Sostenibilidad en la práctica médica. Implementar prácticas sostenibles en hospitales y clínicas, como reducir el desperdicio de materiales, reciclar, y usar tecnologías energéticamente eficientes. Además, pueden fomentar el uso de inhaladores con menores impactos ambientales, como aquellos sin gases propulsores de efecto invernadero.

Educación y formación, Capacitar a los profesionales de la salud sobre las interconexiones entre salud respiratoria y cambio climático. Esto incluye incorporar estos temas en la formación médica continua y en los currículos académicos para formar profesionales conscientes y preparados para responder a estos desafíos.

Abogacía y política pública. Actuar como voces autorizadas en la formulación de políticas que busquen mitigar el cambio climático y proteger la salud pública. Esto puede incluir abogar por políticas de reducción de emisiones, promoción de energías renovables y mejoras en los sistemas de transporte público.

Colaboración multidisciplinaria. Trabajar en colaboración con otras disciplinas y sectores para abordar el cambio climático de manera integral. Esto puede incluir asociaciones con sociedades de otras especialidades médicas, organizaciones ambientales y sectores industriales relevantes.

¿Cómo piensa que pueden contribuir los profesionales de la Medicina?

Los profesionales de la medicina pueden contribuir de manera significativa a la lucha contra el cambio climático a través de diversas acciones, tanto en su práctica clínica diaria como en roles más amplios de liderazgo y educación. Aquí algunas maneras específicas:

Práctica clínica sostenible. Los médicos pueden adoptar y promover prácticas más sostenibles en su lugar de trabajo. Esto incluye el uso eficiente de recursos, reciclaje de materiales desechables, y la digitalización de registros médicos para reducir el uso de papel. Además, pueden optar por productos y tecnologías médicas con una menor huella de carbono.

Educación y concientización. Los médicos tienen una plataforma única para educar a los pacientes y a la comunidad sobre los efectos del cambio climático en la salud pública, como el aumento de enfermedades respiratorias, problemas cardíacos, y el impacto de la contaminación. Pueden usar sus interacciones diarias para fomentar estilos de vida más saludables y sostenibles.

Liderazgo en políticas de salud y públicas. Los profesionales médicos, debido a su credibilidad y conocimiento especializado, están en una posición ideal para influir en las políticas públicas. Pueden abogar por regulaciones y políticas que promuevan la salud pública y la sostenibilidad ambiental, como leyes de calidad del aire, incentivos para energías renovables y la construcción de ciudades más verdes.

Investigación. Participar en investigaciones que estudien los vínculos entre salud y cambio climático puede proporcionar datos cruciales para entender mejor estos fenómenos y desarrollar respuestas efectivas. Esto puede incluir estudios sobre cómo el cambio climático afecta diversas condiciones de salud, qué poblaciones son más vulnerables y cómo mejorar las intervenciones médicas.

Colaboraciones multidisciplinares. Trabajar junto a otros sectores puede potenciar los esfuerzos contra el cambio climático. Los médicos pueden colaborar con urbanistas para diseñar ciudades más saludables, con educadores para mejorar la conciencia ambiental en los currículos escolares, o con líderes empresariales para promover prácticas empresariales que protejan la salud pública y el ambiente.

Adopción de tecnologías verdes. Apoyar y adoptar el uso de tecnologías limpias y renovables en el ámbito de la salud, como energía solar para hospitales, puede reducir significativamente las emisiones de carbono asociadas al sector de la salud, que es considerablemente alto en muchos países.

¿Cree que son importantes jornadas como esta para concienciar a los médicos y a las médicas?

Sí, jornadas de concienciación y educación son extremadamente importantes para los médicos y las médicas, así como para otros profesionales de la salud. Este tipo de eventos cumple varios roles esenciales en la promoción de un enfoque más sostenible y consciente respecto al cambio climático en el ámbito de la medicina:

1. Educación continua. La medicina es un campo que evoluciona rápidamente y requiere una actualización constante. Las jornadas dedicadas a temas específicos, como el cambio climático y su impacto en la salud, proporcionan a los médicos conocimientos actualizados y relevantes que pueden aplicar en su práctica diaria.
2. Sensibilización sobre temas críticos. A través de estas jornadas, se puede sensibilizar a los profesionales médicos sobre la importancia del cambio climático, no solo como una amenaza ambiental global, sino también como un determinante crucial de la salud pública. Esto puede motivar a los médicos a considerar factores ambientales en sus diagnósticos y recomendaciones.
3. Promoción de prácticas sostenibles. Estos eventos ofrecen una plataforma para discutir y promover prácticas clínicas más sostenibles, desde la gestión de residuos hasta la eficiencia energética en hospitales y clínicas. Proporcionar ejemplos prácticos y viables puede facilitar la adopción de estas prácticas en el sector salud.
4. Fomento de la colaboración. Las jornadas también sirven como un espacio para la colaboración y el networking entre profesionales de diferentes especialidades y regiones, lo que puede llevar a iniciativas conjuntas o proyectos de investigación multidisciplinarios sobre salud y cambio climático.

¿Qué consejos les da a sus pacientes para mejorar su salud a la vez que contribuyen a la lucha contra el cambio climático?

Los médicos pueden ofrecer una variedad de consejos a sus pacientes que no solo promueven una vida más saludable sino que también contribuyen a la lucha contra el cambio climático. Aquí algunos ejemplos prácticos:

1. Dieta sostenible: Fomentar una dieta rica en frutas, verduras, legumbres y granos enteros, y reducir el consumo de carne, especialmente roja y procesada. Las dietas basadas en plantas tienden a tener una huella de carbono más baja y también son beneficiosas para la salud cardiovascular y general.
2. Actividad física sostenible: Incentivar el uso de medios de transporte activos como caminar, montar bicicleta o usar transporte público en lugar de vehículos privados. Esto no solo reduce las emisiones de gases de efecto invernadero, sino que también promueve la actividad física regular, crucial para prevenir enfermedades como la hipertensión, diabetes y obesidad.
3. Reducción de residuos: Educar sobre la importancia de reducir, reutilizar y reciclar. Esto incluye desde minimizar el uso de plásticos desechables hasta promover el reciclaje de medicamentos y sus envases, lo cual puede tener un impacto significativo en la reducción de residuos.
4. Uso eficiente de recursos: Animar a los pacientes a ser más conscientes del consumo de agua y energía en sus hogares. Esto puede incluir medidas como reducir el uso de agua caliente, instalar bombillas de bajo consumo y aprovechar la energía solar cuando sea posible.
5. Apoyo a la economía local y sostenible: Alentar la compra de productos locales y de temporada, lo cual no solo apoya a la economía local sino que también reduce las emisiones asociadas al transporte de alimentos y productos de larga distancia.
6. Conciencia sobre la calidad del aire: Informar sobre la importancia de monitorizar y mejorar la calidad del aire en interiores y exteriores. Usar purificadores de aire si es necesario y apoyar políticas locales que busquen reducir la contaminación del aire.
7. Participación comunitaria: Motivar a los pacientes a involucrarse en iniciativas comunitarias de sostenibilidad, como programas de plantación de árboles, limpieza de parques y ríos, o proyectos de energía renovable comunitarios.