Organizada por la Asociación Española contra el Cáncer (AECC) de Cantabria, está formada por fotografías e historias de afectados por el cáncer y podrá visitarse hasta el 27 de marzo en el patio principal del Consistorio

El Ayuntamiento de Santander acoge hasta el 27 de marzo la exposición Acércate a mi realidad, organizada por la Asociación Española contra el Cáncer (AECC) de Cantabria para concienciar a la sociedad sobre el impacto emocional que deriva un diagnóstico de cáncer.

La alcaldesa de Santander, Gema Igual, ha participado en la apertura de la muestra, junto al presidente de la AECC de Cantabria Pedro Prada y el concejal de Salud, Juan Domínguez.

Se trata de una exposición de paneles en los que el visitante podrá visualizar una serie de fotografías e historias de pacientes y familiares reales y está ubicada en el patio principal del Consistorio.

El objetivo es subrayar la importancia de una atención psicológica de calidad durante todas las fases de la enfermedad y para todos los afectados, pacientes y familiares, poniendo en valor la labor de psicooncología que desarrolla la AECC.

“Detrás de una persona con cáncer hay muchas emociones que no podemos ver”, ha asegurado la alcaldesa, que ha animado a los vecinos a visitar la exposición.

En palabras de la regidora santanderina se trata de una oportunidad para dar visibilidad a la labor que presta la Asociación Española Contra el Cáncer a través de la psicooncología.

Según ha destacado, la AECC lleva 30 años ofreciendo tratamiento psicológico especializado a pacientes y familiares, con más de 250 profesionales de la psicología y 30.000 personas atendidas cada año, lo que equivale al 13% de las personas que se estima necesitan atención psicológica en España.

Pese a los avances científicos, el cáncer sigue siendo una de las enfermedades más temidas ya que se asocia a sufrimiento y dolor de tal manera que su diagnóstico provoca un importante impacto psicológico en pacientes y familiares.

En esta exposición, el público podrá profundizar en experiencias vitales de distintos pacientes y familiares, con importantes desafíos y sentimientos dolorosos que pueden derivar en altos niveles de sufrimiento y malestar emocional y problemas de adaptación a la enfermedad.

Cuando un diagnóstico de cáncer aparece en un núcleo familiar surgen reacciones emocionales como rabia, ira, ansiedad, tristeza, sentimientos que no se limitan a las fases de diagnóstico inicial y tratamiento, sino que también son frecuentes una vez finalizada la etapa de tratamiento.

Según datos de la AECC, el 30% de las personas afectadas desarrollarán algún tipo de trastorno psicopatológico que necesitaría tratamiento especializado, lo que supone que en Cantabria hay actualmente unas 1.200 personas afectadas por la enfermedad que necesitarían tratamiento psicológico especializado.

La Asociación Española contra el Cáncer asegura que el tratamiento psicológico especializado es eficaz y un estudio realizado por esta entidad pone de manifiesto que tras el tratamiento recibido se observa una disminución significativa del nivel de malestar emocional, así como un efecto beneficioso sobre los niveles de sintomatología ansiosa y depresiva.

La exposición, un llamamiento al compromiso

La AECC defiende un modelo de atención integral y multidisciplinar donde el tratamiento psicológico especializado esté integrado en el cuidado habitual como un elemento más de calidad asistencial a las personas afectadas por el cáncer.

La estrategia en cáncer del Sistema Nacional de Salud incluye, como un objetivo prioritario, proporcionar atención psicológica a pacientes de cáncer y sus familiares.

Por ello, a través de esta iniciativa, la Asociación Española Contra el Cáncer realiza un llamamiento al compromiso para mejorar la atención psicológica a las personas afectadas por el cáncer y sus familias.

Igualmente, la muestra busca llamar la atención de las instituciones y administraciones sanitarias para que en el proceso de atención a las personas con cáncer y sus familiares se contemple necesariamente la asistencia integral.