El doctor Jesús Román Martínez, presidente de la Sociedad Alimentación Saludable y profesor de la Universidad Complutense de Madrid, aborda en el Colegio de Médicos la nutrición en el ámbito laboral

Que la dieta mediterránea es muy conocida, pero la mayoría de los españoles no la sigue o que la alimentación saludable en el trabajo consigue unos resultados muy positivos para la rentabilidad de las empresas son algunas de las afirmaciones que ayer realizó el doctor Jesús Román Martínez Álvarez, presidente de la Sociedad Alimentación Saludable y profesor de la Universidad Complutense de Madrid, en el Aula de Salud del Colegio de Médicos de Cantabria.

El Aula de Salud está organizada por el Colegio de Médicos y El Diario Montañés, y cuenta con el patrocinio de la Consejería de Sanidad, el Servicio Cántabro de Salud (SCS), la Fundación Valdecilla, el centro deportivo Marisma y colabora la empresa Gullón

Durante su conferencia, titulada Nutrición saludable en el trabajo: una acción rentable para la empresa y la sociedad, abordó la realidad de los españoles con respecto a su alimentación que “no cumple los requisitos fundamentales para evitar enfermedades como la diabetes, la osteoporosis o  la hipertensión, patologías que generan miles de bajas laborales en España”.

Además, aportó datos como que España será el país con mayor esperanza de vida de Europa y tendrá muchas personas con más de 100 años con enfermedades crónicas debidas a la obesidad, el colesterol o la hipertensión, y muchos de ellos habrán enfermado a los 50 años y vivirán  hasta edades muy avanzadas con lo que generan unos gastos al sistema muy preocupantes.

La única solución a este problema, que ya se está notando en la sociedad actual, pasa por una buena alimentación en todos los ámbitos, también en el trabajo, donde comen habitualmente miles de personas en España. “Hay que moverse y alimentarse bien con una dieta mediterránea que se basa en muchas legumbres, verduras y frutas y menos pescados y carnes, en definitiva, comidas frugales con esas materias primas apartándose de inventos que aún no han demostrado que funcionan”, según Martínez.

En concreto, alimentarse de una manera saludable en el trabajo influye en el 65 por ciento de las personas por lo que si lo hacemos podemos reducir el absentismo y mejorar el rendimiento y la rentabilidad, y, según el experto, si se midiera los efectos de estos hábitos se tomarían medidas porque “si la felicidad aumenta por una buena salud, el absentismo se reduce y la rentabilidad crece por lo que los empresarios estarán contentos”.

Martínez añadió que en el trabajo se come de cualquier manera “aunque hay comedores muy elegantes porque hay empresas que no saben cómo solucionar el problema y montan máquinas, algunas con productos saludables y otras no, e incluso instalan comedores veganos pero la realidad es que no nos alimentamos bien aunque sabemos qué nos conviene, como ocurre con el tabaco, sabemos que fumar es malo y seguimos haciéndolo”.

Para finalizar, el profesor concluyó que, según el test de dieta mediterránea, “la mayoría de los trabajadores españoles no la sigue, comen fruta y verdura dos veces por semana y piensan que es suficiente, el 40 por ciento  tienen sobrepeso, y de ellos el 53 por ciento de los hombres y el 46 por ciento de las mujeres tienen una medida de cintura con riesgo cardiovascular (ICT) que puede producir lesiones irreversibles”.