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La especialista en Familia y tutora de residentes, Yolanda Cuerno, recogió uno de los reconocimientos del COM Cantabria a la labor docente

La doctora Yolanda Cuerno estudió Medicina en la Universidad de Cantabria y  se especializó  en Familiar y Comunitaria en el Hospital La Paz de Madrid. Comenzó  a trabajar como interina durante ocho años en el Centro de Salud  de Camargo Interior, centro docente donde  inició su labor de formación de residentes y alumnos de Medicina. Actualmente,  y desde hace 26 años, trabaja en el Centro de Salud Dobra de Torrelavega  donde obtuvo su plaza por oposición, y  eligió este centro por su carácter docente para continuar  su labor como tutora de residentes,  aportando su experiencia clínica, sus habilidades de comunicación, el manejo de la incertidumbre,  la organización de la consulta, técnicas como infiltraciones, ecografía y cirugía menor,  gestión de los recursos y,  sobre todo, promoviendo el desarrollo de la empatía y la atención centrada en el paciente.  El Colegio de Médicos de Cantabria valoró esta  amplia  trayectoria profesional para reconocer a Yolanda Cuerno como tutora y docente en el ámbito de la Medicina de Familia.

– Tu eres la responsable de Formación de Medicina de Familia, una especialidad fundamental para el Sistema de Salud pero poco demandada ¿por qué crees que es así?

No creo que sea una especialidad poco demandada. Una de las razones puede ser que la oferta de plazas en los últimos años es muy elevada, superior a 2.000, si el resto de especialidades tuvieran la misma oferta pienso que ocurriría lo  mismo, no todo el mundo quiere ser cardiólogo, familiólogo o cirujano, por poner un ejemplo. Por otro lado, la información en los medios de comunicación sobre la masificación de las consultas de primaria, la burocratización, la pérdida de reconocimiento social, la falta de recursos humanos… junto con el
desconocimiento de la especialidad por parte de los estudiantes de Medicina, opino que están contribuyendo negativamente.

-¿Qué medidas crees que la Administración debe poner en marcha para poner en valor esta especialidad?

En primer lugar, que se conozca lo que es la Medicina de Familia, una especialidad compleja, con alta capacidad de resolución de problemas de salud, superior al 90% de los atendidos cada día, y un pilar básico en el funcionamiento del Sistema de Salud. Para ello creo que es fundamental que se introduzca como
obligatoria la asignatura de Medicina Familiar y Comunitaria en todas las facultades de Medicina de nuestro país y que todos los estudiantes roten por Atención Primaria.

También, la mejora de las condiciones laborales aumentado los recursos humanos para evitar la sobrecarga asistencial, una oferta laboral más atractiva para asegurar una continuidad de nuestros residentes y campañas de educación a la población para favorecer el uso racional de los servicios de Salud. Todo ello, contribuiría a facilitar la práctica de la Medicina Familiar en todos sus aspectos con una mayor valoración y satisfacción por parte de la población.

-Cuéntanos cuantos tutores y formadores componen tu equipo y si son suficientes para atender las necesidades formativas para los futuros médicos de Familia.

En mi centro de Salud trabajamos once médicos de familia, de los cuales seis somos tutores y tres pediatras, que también contribuyen a la formación de los residentes en el área pediátrica, y el resto de médicos junto con la matrona, la trabajadora social, enfermería, fisioterapia e incluso el mostrador, colaboran para complementar las necesidades formativas de nuestros residentes ampliando sus conocimientos sobre las diferentes actividades que se realizan dentro del equipo de primaria.

-Con respecto al perfil de los Mires que eligen Medicina de Familia ¿crees que ha cambiado en los últimos años?

En general, los médicos que eligen Familia son un grupo muy heterogéneo, predominan las mujeres, como en otras muchas especialidades, y la edad media es probablemente mayor que hace unos años. En muchos casos, la Medicina de Familia no es su primera opción, pero según mi experiencia, muchos de estos residentes acaban, tras conocer la especialidad, muy satisfechos y continúan realizando una muy buena asistencia como primaristas.

-Para terminar, ¿cuáles son tus planes a corto y medio plazo para mejorar la formación de los residentes de Familia?

Continuar transmitiendo el entusiasmo por la Atención Primaria, la importancia de formarse en todas las actividades que abarca esta especialidad, fomentando el estudio, la puesta al día según la evidencia científica, aprender nuevas técnicas, que están permitiendo el crecimiento de la Medicina de Familia y desarrollar una asistencia centrada en el paciente, empática y eficiente.