La doctora Cristina Clare Gallego de Largy ha intervenido en la primera charla en la Cruz Roja hablando sobre la cooperación de los médicos en África

El Colegio de Médicos de Cantabria colabora con Cruz Roja Española en la promoción de la salud con un ciclo de charlas que se van a impartir a lo largo de todo el año. La primera charla la ha ofrecido la doctora Cristina Clare Gallego de Largy, quien ha hablado sobre la labor de los cooperantes médicos en África.

El responsable de Cooperación del Colegio de Médicos de Cantabria, el doctor Fernando de la Torre, presentó a la cooperante como “una joven modélica y muy activa en todas las expediciones humanitarias en las que ha participado”. Destacó la juventud de la doctora y la experiencia que tiene recorriendo medio continente africano.Por su parte, Sandra Amor López, Técnica Personas Mayores de Cruz Roja Española, agradeció la colaboración entre el Colegio de Médicos de Cantabria y Cruz Roja para llevar a cabo todas estas charlas relacionadas con la salud.

La residente en ginecología y obstetricia en el Hospital Marqués de Valdecilla ha narrado su experiencia como cooperante durante su periodo de formación en el hospital cántabro. Así explicó su experiencia en países como Uganda, Kenia y Camerún en colaboración con la asociación Idiwaka.

La doctora, galardonada con el Premio de Cooperación Fernando de la Torre 2022, otorgado por el Colegio de Médicos de Cantabria, destacó que la labor que ha realizado a lo largo de los diversos años que han desarrollado las labores de cooperación “ha sido proyectos para los hospitales africanos, en donde prima la formación y el trabajo en equipo con los profesionales nativos”.

Así, recalcó que con la asociación Idiwaka, creada en el seno de la Fundación África Directo, en donde todos son voluntarios médicos, se realizan campañas ginecológicas, oftalmológicas y pediátricas, pero sobre todo han realizado una campaña sobre el cáncer de cervix, ya que el cáncer de cuello de útero (CCU) es el tercer cáncer más frecuente a nivel mundial entre las mujeres.

“En países con suficientes recursos, se ha conseguido reducir hasta un 80-90% la incidencia y mortalidad por este cáncer gracias al cribado de mujeres asintomáticas”, destacó la profesional cooperante. Así expuso datos, como en Uganda, en donde en el año 2019 murieron 99.400 mujeres. La tasa de incidencia de cáncer de cérvix es marcadamente elevada, contabilizándose 5.854 casos. Por lo que el riesgo relativo de padecer esta enfermedad es de 4,4, una cifra mucho más elevada que el riesgo acumulado en el resto del mundo.

Asimismo, narró cómo han sido sus experiencias, no sólo profesionales, sino como se ha ido adaptando a la forma de vida de los países por donde ha estado. Recordó “su primera cerveza”, “su primer paciente”, cómo fueron invitados a la primera boda e incluso hasta “su primer funeral”.

En el área profesional, a doctora Gallego, recalcó que la idea principal de la Asociación se basa en que la única forma de conseguir un “verdadero cambio” es capacitando al personal local para que ellos mismos sean los impulsores de su propio progreso. Por ello, una de las principales metas es la formación de los trabajadores, principalmente en el terreno sanitario.

Por último, recordó que en Idiwaka todos son voluntarios, que destinan su tiempo libre a organizar proyectos, recaudar fondos y viajar a distintos países para supervisar y llevar a cabo nuevos programas. “Al no tener trabajadores ni gastos administrativos, el 100% de lo recaudado se destina a la ejecución de los mismos”, recalcó la doctora Gallego.