Con motivo de la celebración del día europeo contra las agresiones a médicos y profesionales sanitarios, la OMC organiza una jornada el 11 de marzo. Durante esta, se presentarán los datos anuales recogidos por los Colegios de Médicos y se contará con los testimonios de víctimas de esta lacra.

El Dr. Luis Alfonso Pérez Gallego, secretario general del Colegio de Médicos de Zamora y miembro del Observatorio de Agresiones a Médicos de la Organización Médica Colegial (OMC) destaca en esta entrevista que las agresiones tienen consecuencias sistémicas en la calidad general de la atención médica.

Ahora que hay más conciencia sobre las agresiones y su impacto en los profesionales, ¿qué es necesario para que se denuncien todas las que se producen?

El motivo por el cual los sanitarios no denuncian, es el miedo. Por eso insistimos en que “si no hay denuncia, no se puede actuar judicialmente. Es muy importante siempre realizar un parte de lesiones y poner la denuncia ante la Policía Nacional que de inmediato la traslada al juzgado de instrucción” y comunicarlo al Colegio de Médicos .

Harina de otro costal son las penas con las que se castigan las agresiones. “Las penas tipificadas en el Código Penal son bajas”. Existen ejemplos de sentencias en la que una agresión física con golpes se saldó con una multa de 180€.

¿Cómo afecta este hecho a la labor profesional?

Las agresiones a profesionales de la salud tienen un impacto significativo en la calidad de la atención médica, como estrés y ansiedad, que disminuyen la capacidad para la toma de decisiones y brindar una atención óptima a los pacientes. También existe desgaste, los profesionales de la salud pueden sentirse desilusionados  y emocionalmente agotados.

Esto afecta su compromiso con la profesión y su disposición para brindar una atención de alta calidad. Si los profesionales están bajo estrés debido a agresiones, es probable que la experiencia del paciente se vea afectada negativamente.

En resumen, las agresiones a médicos y profesionales de la salud no solo afectan a nivel individual, sino que también tienen consecuencias sistémicas en la calidad general de la atención médica.

¿Qué herramientas necesitan los médicos para hacer frente estas situaciones?

En el ámbito de la prevención de agresiones a profesionales de la salud, se han implementado diversas medidas para abordar este grave problema:

• La instalación de botones o timbres antipánico en los centros permite a los profesionales alertar rápidamente ante una situación de riesgo.
• Proporcionar formación específica a los profesionales del ámbito sanitario para manejar y prevenir agresiones.
• Campañas de sensibilización para concienciar tanto a los profesionales como a la población sobre la importancia de prevenir agresiones.
• Informar a la ciudadanía sobre la existencia del Interlocutor Policial Sanitario, quien brinda apoyo en casos de agresiones.

¿Cómo ha evolucionado el papel del Observatorio contra las agresiones tras casi 15 años?

El Observatorio Nacional de Agresiones a Médicos, creado por el Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos (CGCOM), ha desempeñado un papel crucial en la identificación y abordaje de las agresiones hacia los profesionales de la salud en España. A lo largo de casi 15 años, su evolución y contribución han sido notables. Durante los primeros años, se centró en la recopilación de casos y en la concienciación sobre la gravedad del problema.

Más tarde se profundizó en el análisis de las agresiones. Se publicaron informes anuales que destacaban las tendencias y patrones de violencia. Se identificaron áreas críticas, como Atención Primaria, donde las agresiones eran más frecuentes.

El Observatorio ha desempeñado un papel crucial en la sensibilización tanto de los profesionales como de la sociedad en general. A través de publicaciones, entrevistas y formación, se ha promovido la conciencia sobre la importancia de prevenir las agresiones.

En resumen, el Observatorio ha evolucionado desde su creación hasta convertirse en un referente en la lucha contra las agresiones a los profesionales de la salud, y su trabajo continuo es esencial para proteger a quienes cuidan de nuestra salud.

Se instauró el 12 de marzo como el Día Europeo Contra las Agresiones al que se sumaron las instituciones europeas a iniciativa de la OMC, ¿qué ha supuesto este hecho?

Al establecer un día específico para abordar este problema, se ha logrado una mayor concienciación pública sobre las agresiones a médicos y médicas. Las instituciones europeas se han unido para reconocer la gravedad de este fenómeno. La iniciativa de la OMC ha fomentado la solidaridad entre los países europeos.

Las instituciones, los profesionales de la salud y la sociedad en general se han unido en la lucha contra las agresiones. La fecha ha ganado visibilidad internacional, lo que ha permitido compartir buenas prácticas y experiencias entre países. De este modo, se han intercambiado conocimientos sobre cómo enfrentar este desafío.

¿Qué más se puede hacer desde la OMC para acabar con esta lacra?

La Organización Médica Colegial (OMC) y el Observatorio de Agresiones a Médicos tienen un papel crucial en la protección de los médicos y la prevención de agresiones. Se trabaja y se seguirá trabajando en promover la concienciación y la educación llevando  a cabo campañas de sensibilización para informar al público sobre la importancia de respetar y proteger a los médicos.

La Organización Médica Colegial desea trabajar en conjunto con organismos gubernamentales, instituciones de salud y organizaciones internacionales para desarrollar estrategias integrales que aborden las agresiones a médicos desde múltiples frentes. Por tanto, la OMC debe seguir siendo una voz fuerte en la defensa de los derechos y la seguridad de los médicos, y trabajar incansablemente para erradicar esta lacra de nuestra sociedad

El curso de agresiones de la FFOMC ya ha formado a más de 2500 alumnos, ¿qué importancia tiene la formación en este ámbito?

La formación en el ámbito de prevención y manejo de agresiones es de suma importancia para los profesionales de la salud, incluidos los médicos. La formación proporciona a los médicos las habilidades necesarias para identificar situaciones de riesgo y tomar medidas preventivas. Aprender técnicas de desescalada y cómo manejar la violencia verbal o física puede ayudar a proteger su seguridad y la de sus colegas. Saber cómo comunicarse efectivamente con pacientes o familiares enojados o alterados es fundamental para mantener un entorno seguro. La Formación aumenta la conciencia sobre el problema de las agresiones. Los médicos pueden comprender mejor las causas subyacentes y los factores de riesgo, lo que les permite estar más preparados para prevenir y abordar estas situaciones. También es beneficioso conocer sus derechos y responsabilidades legales en caso de agresiones. Los médicos aprenden cómo manejar el estrés postraumático y buscar ayuda cuando sea necesario.

Resumiendo, la formación no solo equipa a los médicos con habilidades prácticas, sino que también fomenta una cultura de respeto mutuo y seguridad en el entorno de atención médica .

¿Cómo es la colaboración con los interlocutores policiales?

La Organización Médica Colegial (OMC) trabaja en estrecha colaboración con los interlocutores policiales para abordar las agresiones a médicos y profesionales sanitarios. El Observatorio Nacional contra las Agresiones en el Ámbito Sanitario de la OMC mantiene reuniones con los interlocutores de la Policía Nacional y Guardia Civil. Estos encuentros permiten coordinar esfuerzos y compartir información sobre incidentes de agresión. Se trabaja conjuntamente para erradicar la violencia dirigida a los profesionales sanitarios en España. Ambas partes colaboran activamente para contabilizar y analizar las denuncias presentadas. Por todo lo cual, la colaboración con los interlocutores policiales es fundamental para proteger a los médicos y garantizar un entorno seguro en el ámbito sanitario

¿La telemedicina ha afectado la relación médico-paciente? ¿Han aumentado las agresiones telemáticas y por redes sociales? ¿Cómo se puede trabajar en este ámbito?

La telemedicina ha transformado la relación médico-paciente al incorporar avances tecnológicos. Aunque ofrece beneficios, también plantea desafíos. La violencia digital ha aumentado un 17,5% en el último año, incluyendo el acoso en redes sociales y aplicaciones de mensajería. Las agresiones telemáticas pueden afectar la relación médico-paciente.

La OMC debe establecer directrices claras sobre el uso responsable de la telemedicina. La humanidad y la confidencialidad deben prevalecer.  Debe capacitar a los médicos en habilidades de comunicación virtual y manejo de situaciones delicadas. Establecer mecanismos para reportar y abordar agresiones telemáticas. Informar a los pacientes sobre la telemedicina y cómo pueden proteger su privacidad y seguridad.