El sueldo base medio de un Médico Interno Residente, sin guardias, es de 1.003 euros netos y casi el 30% de las plazas ofertadas, 2.338, son de medicina familiar y comunitaria

Mujer (el 66,1%), principalmente médico de familia (el 29,27%) y mileurista (con un sueldo medio sin guardias de 1.003 euros netos). Estos son los principales rasgos de los nuevos 7.987 MIR (Médicos Internos Residentes) de 2021, que acaban de obtener su plaza y que serán los sanitarios que luchen contra la pandemia del SARS-CoV-2 en los próximos años. Para estas casi 8.000 plazas ha habido este año 10.805 aspirantes.

A partir del 20 de julio se han incorporado ya a sus plazas los 7.987 MIR de la presente convocatoria, 372 más que el pasado año. Con una media de edad superior a los 25 años, tras un expediente excelente, seis años de licenciatura y un año de preparación del MIR les restan entre 4 a 5 años para terminar su formación e incorporarse, con una edad media de entre 28 y más de 30 años, a un puesto de médico especialista con una extraordinaria formación que, durante toda su vida profesional deberán mantener perfectamente actualizada.

“Muchos compañeros de instituto de estos médicos, que eligieron otras profesiones, si han tenido suerte al encontrar trabajo, llevarán entre 6 y 12 años trabajando, cotizando y progresando en su profesión”, asegura Vicente Matas, del Centro de Estudios del Sindicato Médico de Familia, autor del informe sobre los MIR 2021. ”Necesitaremos muchos médicos especialistas en los próximos años para cubrir un importante número de jubilaciones y cada año se quedan muchos aspirantes sin posibilidad de obtener plaza y por tanto sin especializarse y poder acceder a plazas del SNS. Este año se ha dado un paso adelante, pero insuficiente y tarde”, asegura Matas.

Pero, ¿cuál es la radiografía de los médicos residentes de esta convocatoria 2021? Convocatoria, por otro lado, en la que los médicos recibirán, por primera vez, una formación específica conta la Covid-19. El primer dato que sobresale es que el 66,1% son mujeres. Un porcentaje levemente superior al del año pasado, que se situó en el 64,7%. Las provincias en las que el porcentaje de mujeres es mayor son Álava (79,1%), Castellón (77%), Cuenca (77%) y Huelva (75,8%), mientras que Teruel (47,1%), Ceuta (42,9%) y Melilla (33,3%) no alcanzan la paridad. Obstetricia y Ginecología, Pediatría y Alergología son las especialidades más demandadas por las mujeres, y Cirugía Oral y Maxilofacial, Farmacología Clínica y Cirugía Cardiovascular, las que menos.

La especialidad de Medicina Familiar y Comunitaria es la que oferta un mayor número de plazas, supone el 29,27% del total de las convocadas (2.338 este año, cuando eran 2.224 en la anterior convocatoria o 1.914 en el año 2019). Es la base de nuestro sistema sanitario por el número de profesionales que la ejercen en el SNS, 29.743 en los equipos de Atención Primaria en el año 2019, más 6.378 en Urgencias de Atención Primaria y un importante número en Urgencias de Hospital y Servicios Emergencias-061; la ingente actividad que desarrolla (203.728.915 consultas ordinarias y 23.649.975 urgencias médicas en el año 2019 en Atención Primaria) y es la especialidad «que garantiza la equidad y el acceso a la salud hasta en el hogar más alejado del pueblo más aislado». Sin embargo año tras año no es de las más elegidas entre los aspirantes con mejor número.

«En manos de la Administración está introducir, en mayor medida, la medicina de familia en las Facultades» y mejorar las condiciones del ejercicio de la profesión en el primer nivel asistencial, «para convertirlo realmente en el eje del sistema, como la forma más eficiente de conservar el pilar básico del Estado del bienestar» y hacer frente a futuras pandemias, «en las que la atención primaria realiza el diagnóstico, seguimiento, control y alta de aproximadamente el 90% de las infecciones«, se asegura desde la profesión médica y el foro de Médicos de Atención Primaria.

Lógicamente, y debido a su mayor población, Madrid, Andalucía, Cataluña y Comunidad Valenciana, acumulan un total de 4.732 plazas, lo que supone el 59,25% de las 7.987 adjudicadas en la presente convocatoria MIR. Cantabria, Extremadura, La Rioja y Ceuta y Melilla, las que menos. Donde ‘casi’ no hay disparidades es en el sueldo que percibe un residente de primer año, sin contar guardias: 1.057 euros netos de media, siendo el sueldo mínimo de 1.003 euros y el máximo de 1.135. Ello sin tener en cuenta que, los MIR de primer año destinados en Ceuta y Melilla perciben un sueldo neto de 1.898 euros mensuales.

Entre las Comunidades, las que menos pagan a sus MIR de primer año son Navarra (1.003 euros), Galicia (1.011) y Andalucía, Cantabria y Castilla y León, con 1.029 euros netos sin guardias. En el otro lado de la balanza, Canarias (1.135), el País Vasco (1.104), Baleares (1.098) y Madrid, con 1.092 euros netos. «Somos, sin duda, la mano de obra barata del Sistema nacional de Salud«, asegura a La Información uno de los 7.987 nuevos MIR que ya está en su puesto y se ha ajustado la bata blanca desde el 20 de julio.